jueves, 25 de octubre de 2007

Pam...pam...

Cambalache....
Santos Discepolo


Que el mundo fue y será una porquería
ya lo sé...
(¡En el quinientos seisy en el dos mil también!).
Que siempre ha habido chorros, maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos, valores y dublé...

Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos en un merengue
y en un mismo lodo
todos manoseaos...

¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!...
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!

¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro
que un gran profesor!

No hay aplazaos
ni escalafón,
los inmorales
nos han igualao.

Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
¡da lo mismo que sea cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón!...

¡Qué falta de respeto, qué atropello a la razón!
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y "La Mignón",
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...

Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia
contra un calefón...

¡Siglo veinte, cambalache
problemático y febril!...
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil!

¡Dale nomás!
¡Dale que va
¡Que allá en el horno
nos vamo a encontrar!
¡No pienses más,
sentate a un lao, que a nadie importa
si naciste honrao!

Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley...


Pam pam

(¿tamos de acuerdo? jajajajja)


jueves, 18 de octubre de 2007

Apuntes para ser leídos por los lobos


El lobo, aparte de su orgullosa altivez, es inteligente, un ser sensible y hermoso con mala fama... Trata de sobrevivir. Y observa al humano: le parece abominable, lleno de maldad, cruel; tanto así que suele utilizar proverbios tales como: "Está oscuro como boca de hombre", para señalar algún peligro nocturno, o "el lobo es el hombre del lobo", cuando este animal llega a ciertos excesos de fiereza semejante a la humana.

René Avilés Fabila



Me gustan los lobos...nada de andar siguiendo al pastor ni obedeciendo al perro ovejero. Un lobo no va ni viene con las palabras altisonantes, no se rinde al halago ni a las amenazas, no va cabeza baja en el rebaño ni se encoge ante la oscuridad. Sabe hablar con la noche...no sobreviven en la lastimosa quejumbre humana de algunos, ni se arrastran en la miseria de los juicios, paradigmas , ¡tan abundantes en la vida de hombres y mujeres!


Herman Hesse, describe con maestría en ese Lobo estepario, leído hace tanto y que siempre se quedó en mi memoria, la esencia del ser lobo...Quizás, no hemos sido justo con ellos...quizás no sabemos valorar su sabiduría innata, esa que le hace intuir que no cualquier humano es digno de su intimidad, de su cercanía...(Salvo Francisco, parece...)


¡Me gustan los lobos! No andan por ahí llorándose la vida, dscalificando aquello que no entienden, provocándose penas innecesarias y culpando a todo el reino animal por su ser inconcluso...La manada le es necesaria pero, quizás, porque han descubierto el secreto de no perturbar la vida del otro y de mantener la autonomía de respirar...cuando eso se quiebra, muestran dientes y garras y saben defender su espacio con fiereza.


Quizás, lo único que necesitan para darnos clases de convivencia, es un gran supermercado donde proveerse de alimentos en forma no violenta.


Insisto, ¡me gustan los lobos! ¡Nada de andar llorándose la vida por cada rincón del planeta!

A lo más, un aullido a la luna, justo al filo de la medianoche...


Marga

martes, 2 de octubre de 2007

Pàjaro azul...


Hay un pájaro azul en mi corazón que
quiere salir
pero soy duro con él,
le digo quédate ahí dentro, no voy
a permitir que nadie
te vea.


Hay un pájaro azul en mi corazón que
quiere salir
pero yo le echo whisky encima y me trago
el humo de los cigarrillos,
y las putas y los camareros
y los dependientes de ultramarinos
nunca se dan cuenta
de que esté ahí dentro.


Hay un pájaro azul en mi corazón que
quiere salir
pero soy duro con él,
le digo quédate ahí abajo,

¿es que quieres hacerme un lío?
¿es que quieres mis obras?
¿es que quieres que se hundan las ventas de mis libros
en Europa?


Hay un pájaro azul en mi corazón
que quiere salir
pero soy demasiado listo, sólo le dejo salir
a veces por la noche
cuando todo el mundo duerme.
le digo ya sé que estás ahí,
no te pongas
triste.
Luego lo vuelvo a introducir,
y él canta un poquito ahí dentro,

no le he dejado morir del todo
y dormimos juntos
así
con nuestro
pacto secreto
y es tan tierno como
para hacer llorar
a un hombre, pero yo no
lloro,

¿lloras tú?


Charles Bukowski

lunes, 1 de octubre de 2007

De Leonardo Boff

Abrazar a cada ser,

hacerse hermana y hermano.

Oír el cantar del pájaro en la rama.

Auscultar en todo un corazón

Que palpita en la piedra y hasta en la lama.

Saber que todo vale y nada es en vano.

Y que se puede amar incluso a quien no ama.

Llenarse de ternura y compasión.

Por el bichito que por ayuda clama.

Conversar hasta con el fiero lobo

Y convivir y besar al leproso

Y, para alegrar, hacer de bobo.

Sentirse de la pobreza el esposo.

Y derramar afecto por todo el globo:

He aquí el amor franciscano: ¡oh supremo gozo!


Leonardo Boff

Es inevitable...


A esta hora,
precisamente,
en algùn lugar del mundo
alguien sufre.

Alguien araña el amanecer que se resiste,
espera el sol con urgencia,
desgrana imàgenes de un racimo ácido
agrio
que arde y se disuelve en la boca
como una gota de cicuta....
A esta hora
en cualquier lugar del mundo
alguien sufre.

Es inevitable.
Misterio que envuelve y ahoga.
¡Y une y ata a tanta alma insomne!
Nadie sabe más del dolor que el silencio quieto de la madrugada...